La claustrofobia es una fobia específica por la cual la persona reacciona con desesperación por miedo a ahogarse o sofocarse al quedar en el interior de un lugar cerrado, como puede ser un ascensor.
Además esta fobia puede desatarse frente a cualquier espacio reducido como puede ser el metro, el tren, los aviones, los túneles, los dispositivos diagnósticos como la Resonancia Magnética, las habitaciones pequeñas, teatros, cines, auditorios, entre otros.
El miedo al encierro afecta en todas las culturas, razas y niveles socioeconómicos, y su evolución y complicaciones son muy variables pero tiende a ser un cuadro fluctuante y crónico, según los expertos.
La claustrofobia es un problema que puede traer severas consecuencias en la vida normal de una persona porque quien la padece no tiene miedo al espacio cerrado en sí mismo, sino a las posibles consecuencias negativas de estar en ese lugar, como quedarse encerrado para siempre o la asfixia por creer que no hay suficiente aire.
Los síntomas más comunes:
- Falta de aire
- Temor a morir asfixiado
- Taquicardia
- Sudoración
- Mareos
- Desesperación
- Palpitaciones
- Ahogos
- Opresión en el pecho
En general las personas que sufren este trastorno sienten vergüenza, por tener que confesar que no pueden entrar al ascensor por miedo. Sienten temor hacer el ridículo y que los otros se burlen.
También, las personas que sufren esta fobia, tratan de no exteriorizar el temor, y el malestar que se les genera, cuando no tienen más remedio que subir al ascensor. Otras, prefieren ir por la escalera, pero si son muchos pisos, directamente no los suben.
Las personas que padecen de claustrofobia tendrían que pedir ayuda para poder solucionar dicha problemática.
En la actualidad, las investigaciones demuestran que la Terapia Cognitiva Conductual, resulta muy efectiva en el tratamiento de la claustrofobia y se la puede vencer en muy poco tiempo.
El ascensor de por sí es un equipo intrínsecamente seguro, cuando se lo fabrica, instala y mantiene de acuerdo con la normativa.
Las personas con fobia al ascensor, han adquirido dicha problemática por haber quedado en alguna oportunidad encerrados en el ascensor, luego de sufrir una crisis de pánico, por escuchar experiencias de otros que se quedaron encerrados en el ascensor, o por lo que la persona se imagina.
Las principales técnicas que se utilizan para tratar la fobia al ascensor:
- Psicoeducación: consiste en brindarle información al paciente sobre cómo funciona la fobia al ascensor. Dicho conocimiento ayuda a disminuir la ansiedad.
- Relajación.
- Exposición en imaginaria.
- Exposición en vivo y gradual al ascensor: al principio la persona tendría que subir acompañada de un piso por vez, hasta que la ansiedad baje, para poder subir a un nuevo piso. Hasta llegar el momento de subir y bajar solo.